Con unas ventas de PC portátiles que superan las de los ordenadores de sobremesa en EE.UU. y un número de hotspots Wi-Fi públicos en Europa occidental ascendiendo inexorablemente desde los 25.000 en 2004 hasta los 74.000 previstos en 2009†, la movilidad empresarial basada en 802.11 se está convirtiendo claramente en la norma para las empresas.
En torno al 70% de las compañías están invirtiendo en la actualidad en redes WLAN**, lo que demuestra que esta revolución tecnológica impulsada exclusivamente por los usuarios está siendo plenamente adoptada por departamentos informáticos corporativos. Desde que apareció en escena en 2002, el concepto Wi-Fi ha sido imposible de contener – y éste es precisamente uno de los motivos por los que las empresas han sido tan cautelosas hasta ahora.
Gran parte de la conectividad de red inalámbrica empresarial empezó con entusiastas que conectaron oficiosamente puntos de acceso (APs) adquiridos en tiendas a sus redes Ethernet cableadas. Casi inmediatamente, a medida que los aficionados aprendían a conectarse desde aparcamientos de coches, empezaron a surgir problemas de seguridad, y los responsables de red descubrieron que habían perdido espectacularmente el control de sus perímetros.
Dado que con chips y tarjetas PC Card inalámbricas cualquiera puede convertir su PC portátil en inalámbrico, los responsables de red tuvieron que afrontar el triple problema de capacidad de administración, coste y seguridad.
Es ahora cuando empezamos a cosechar los resultados de esto, ya que fabricantes pioneros como 3Com se adelantaron con soluciones de WLAN altamente seguras, administradas de forma centralizada, y económicas.
Nuevos niveles de seguridad 802.11i, WPA2, y AES – junto con VPNs – han permitido aliviar los temores de seguridad. El modelo ‘Thin-AP’, en el que conmutadores inalámbricos inteligentes y seguros administran APs ‘no inteligentes’, constituye el camino hacia delante en cuanto a administración y coste.
El software Wireless Switch Manager permite a los administradores controlar todos los APs, configurando los sistemas de forma centralizada, optimizando la cobertura, y detectando incluso los dispositivos no autorizados. Y debido a esta arquitectura centralizada, los 1.300 usuarios de la RSMAD pueden desplazarse a través del campus, de un AP a otro, sin perder
Hoy en día, los fabricantes tales como 3Com - con dilatada experiencia en conectividad de red de extremo a extremo, inalámbrico, administración, y seguridad – son capaces de desarrollar una conmutación de LAN cableada e inalámbrica totalmente unificada, por unos precios conformes a las necesidades de las empresas incluso más pequeñas.